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Entrevista: Amparo Calavera


¿Qué te impulsó a ser fotógrafa?, ¿cómo empezó y cuándo supiste que la fotografía era tu vocación?

La fotografía ha formado parte de mi vida desde que era muy pequeña. Mi padre revelaba sus fotos en un cuarto oscuro en casa y nos proyectaba las pelis que grababa él mismo en una super8. Le ayudaba algunas veces y me parecía algo mágico el proceso de revelado. Más tarde me compré una cámara compacta que me acompañaba a todos lados, sobretodo a los conciertos. Mi afición fue a más y mi padre me regaló en el instituto una cámara réflex digital, la cual aun conservo. Supe que la fotografía era mi vocación cuando me la llevé por primera vez a un concierto... El rock and roll y la fotografía siempre han hecho buenas migas.

¿Recuerdas la primera fotografía que tomaste de la que te sientas orgullosa?

Recuerdo una de las primeras fotos que hice con mi réflex. Fue en el barrio donde vivía el mismo día que estrenaba la cámara. Me llamó la atención una pequeña mariposa colibrí sobre una flor y decidí disparar a ver que salía. El resultado fue increíble.

¿Qué requisito necesita un fotógrafo? ¿Se aprende o se nace con ese don?

En mi opinión, un fotógrafo nace y después debe formarse, ya sea de forma autodidacta o en una escuela. Tengo que añadir que soy de las que piensa que ninguna escuela enseña a tener pasión por la fotografía, con eso debes nacer. Requisitos, muchos... paciencia, imaginación, ser un buen observador y sobretodo sentir pasión por lo que haces.

¿Crees que la fotografía de bodas y comuniones está viviendo un nuevo renacer?

Gracias a Dios las BBC`s (bodas, bautizos y comuniones) están cambiando. Las fotos de esos eventos siempre me han parecido frías, distantes. Ahora empezamos a plasmar en las fotografías el auténtico sentimiento que se vive en estos eventos. Cada vez las fotos son más espontáneas, frescas, improvisadas y con un aire diferente.

¿Cómo es trabajar en sesiones newbom? ¿Se portan bien los bebes?

Ufff, hay de todo. Son de las pocas sesiones que planeo bien antes de empezarlas. Me gusta tener un esquema mental de como va a ser la sesión, para que sean rápidas y los bebés y los padres se estresen lo menos posible. Aunque las posturas y atrezos los planee muchas veces antes de empezar, también es importante dejar volar la imaginación para que cada sesión sea única e irrepetible. Reconozco que trabajar con niños es difícil, y mucho más si son recién nacidos... Los hay que se portan genial y duermen como angelitos toda la sesión, y los hay que no se duermen ni a tiros. El ambiente tiene que ser muy tranquilo y controlo hasta la temperatura de la sala, el sonido... El resultado, inocencia en estado puro.

¿En qué consiste tu trabajo? Cuéntanos un día en el que trabajas como fotógrafa y no para de sonar click click porque te lo pasas “disparando”.

Me gusta levantarme temprano y organizar la agenda mientras desayuno. Suelo dividir mi día en bloques y dedico cada uno de ellos a una tarea diferente. Por lo general me dedico a retocar fotos y a planear las sesiones por las mañanas, y en cambio las tardes suelo ocuparlas haciendo sesiones de fotos. Si tengo suerte y por la noche hacen algún concierto que me mole me llevo la cámara y hago algún disparo también. Con esas fotos son con las que más disfruto.

¿Qué tipo de técnicas y cámaras manejas?

Me dedico sobretodo a la fotografía digital y al retoque. Disfruto mucho retocando fotos y dándoles mi toque personal. Me acompañan siempre mi Canon EOS 5D mark II y Canon EOS 70D. Tengo también una Canon eso 550D que llevo en el bolso constantemente. Utilizo varios objetivos, y los escojo dependiendo del tipo de sesión que tengo que hacer. Por ejemplo tengo un Canon 24-105mm f2.8 L, Canon 50mm f1.8, Sigma 24-70mm f2.8 entre otros.

¿Que debe tener una fotografía para ser buena?

Debe tener ese algo que nadie sabe lo que es pero que si no lo tiene no transmite nada.

Dentro de los distintos tipos de fotografías que trabajas, ¿con cuál te sientes más cómoda?

Me siento mucho más cómoda en la fotografía de conciertos. Es todo completamente improvisado y varían muchísimo los parámetros para la cámara. Me encanta dejarme los dedos y el cerebro disparando en un buen concierto de rock.

¿Cómo definirías tu fotografía?, ¿cuál es tu estilo como fotógrafa?

Hay que diferenciar los dos tipos de fotografía que realizo, la artística de la comercial. Mis fotografías artísticas son oscuras y muestran como veo el mundo que me rodea. Me gusta fotografiar clubs de carretera, cementerios, retratos y retoco las fotos dándoles un aire siniestro. En cambio, la fotografía comercial que hago es más luminosa y fresca, aunque siempre intento poner mi punto personal.

¿De qué fotógrafos/as has aprendido? ¿Cuáles han sido tus grandes maestros/as?

En el mundo de la fotografía hay muchos grandes maestros. A los que más admiro y de los que más he aprendido quizás son Diane Arbus, Luigi Bussolati, Barrie Wentzell, Ansel Adams, Alberto García-Alix, Alfred Wertheimer, Irvin Penn, Alex Prager... entre otros.

¿Siempre llevas la cámara encima? ¿Haces fotografías constantemente?

Si, siempre hay algo interesante a lo que disparar y dejar para el recuerdo. De normal llevo siempre una vieja Canon 550D encima o el móvil.

¿Nos desvelarías algún truco para hacer una buena fotografía?

Solo hay que echarle imaginación y mantener la mente abierta.

¿Qué sueños o proyectos te faltan por hacer?

Demasiados... Tiempo al tiempo.

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