Ahora se cumplen 40 años de que escribieras tu primera letra “Hiroshima”, ¿qué sientes cuando echas la vista atrás?
Depende en que piense. Si es a lo que me dedico, que es mi oficio y mi pasión, me puedo dar por satisfecho de vivir en este país de lo que me gusta. Luego en general estoy bastante contento, soy un abuelo feliz, hijo feliz, padre feliz, con la problemática que puede tener cualquier persona.
Enrique, ¿crees que aún se puede luchar con una canción frente a un sistema social cada vez más deshumanizado?
Sería cuestión de analizar bien. Un poco puede que sea ese grato momento en el que alguien se identifica con esa temática concreta que uno esté tratando ¿no? A veces las personas se apropian de las canciones y a veces te dan explicaciones o lo que ellos ven en algo que tú has escrito que es más bonito que el significado que le has dado tú. En ese aspecto una canción que trate de pelea, de resistencia y tal, quizás lo que aporta a la persona que la recibe es no encontrarse tan sola. Es como la mercromina de la gran herida que supone lo que estamos viviendo. Hay muchas cosas que son inauditas e incomprensibles. Estamos dejando pasar historias que no se tendrían porque dejar pasar.
El año pasado publicabas “Un día nada más”, directo con el que cerrabas la gira de “Demasiado tonto en la corteza”. Ahora pasado los meses de su publicación, ¿Qué posos te ha dejado?
Bueno, las historias que montamos las vivo en el momento. Todo el proceso de preparación y luego una vez que suceden forman parte del pasado, parte muy bonita claro. El bolo de La Ciudadela en el final de gira fue muy bonito, toda la experiencia acumulada y la experiencia vivida, pero bueno, mañana nos vamos a Cascante donde he preparado la toma de la localidad con canciones, van a ser unos 56 temas a lo largo de todo el día desde las doce y media de la mañana, en diferentes formatos. Sonaran un puñado de canciones que de alguna manera es un poco cuando antes llegaban los circos, pues esto es lo mismo, la farándula llega a Cascante. Me gusta el concepto de llegar y tomar el lugar con canciones.
Por cierto, vaya plantel de invitados ¿no?
Si, muy a gusto, fue una noche inolvidable porque todo el mundo que participo desde técnicos de sonido, de luces, fotógrafos que estaban allí currando para la historia, músicos, invitados, la gente de producción... todo el mundo estuvo al doscientos por cien y eso hace que se hiciese gigante por toda la gente que participo.
Además, yo creo que es un trabajo, indistintamente te guste lo que haga el Drogas o no que deberíamos tener todos por lo que representa. Es que liasteis una muy gorda.
Si, se lio parda. Yo ya lo tengo (risas) ahí cada uno al libre albedrío. Es un disco que esta presentado de una manera… y bueno quien lo quiera tener y sacar más allá de lo estéticamente… pues seguramente tenga donde rascar.
Luego también sacasteis el libro "Un día nada más desde el objetivo"
Si, son fotos de los tres fotógrafos que hubo ese día digamos en el plantel oficial y me fastidiaba que solamente se sacasen... ellos hicieron una pre-selección y a mí me mandaron dos mil fotos y dije: "Esto no puede ser que se quede sin salir". Para el libreto de los CD´s cabían las que cabían, entonces se me ocurrió la idea de sacar un libro. Elegí las fotos entre todas las que me mandaron y le he dado forma a la historia con fotos de las pruebas, de cada formato que fue sucediendo a lo largo de las horas y bueno ese es un poco el resultado de todo esto.
Luego en el tema literario, tampoco vas mal ¿no? Ya has publicado tres libros.
El primero digamos "La tierra esta sorda" un libro-disco con Barricada donde no soy el autor de todo lo que aparece porque pedí también que escribiesen escritos cortos porque no tenía sitio para hacer un libro de 300 páginas. Había que hacer una historia de 180 páginas, entonces unos párrafos de gente que me apetecía relacionar con la guerra civil y luego yo lo que hago un poco explicar a mi manera y tras haber leído muchos libros, un poco lo que sucedió, la proclamación de la segunda república, el golpe de estado, la consiguiente guerra civil y luego el franquismo más cercano a ese acto criminal que supuso el asesinado de miles y miles de personas. Luego ya en el formato de lo que es un libro de escritos "Tres puntadas" que viene dividido como en tres capítulos, son escritos que he ido haciendo a lo largo de un tiempo concreto, pero ya como independiente cada capítulo; podría decirse que es una recopilación de las tres etapas de mi vida a la hora de escribir en un momento dado. Y después "Las zapatillas de volar" que son escritos cortos lanzados a una onda con un punto infantil que todos tenemos y todos debemos saber explotar, ese niño o niña que todos llevamos dentro. Apoyados por ilustraciones de mi colega Chuffi Idoia Zufiaurre que lo empujan muy bien y lo hacen muy ameno.
Entiendo que los escritos que publicaste bajo el seudónimo de Eva Zanroi se pueden encontrar en "Tres puntadas" ¿verdad?
Si, hay esta todo lo que escribí como Eva Zanroi. Fue una época muy concreta en la que me apetecía sacar el lado femenino que todo hombre tenemos. Me apetecía buscar un seudónimo que lo hago con las iniciales de mis apellidos Enrique Villareal Armendáriz hacen Eva, y luego Zanroi, Zandio Ruitegui. Me hace sentir orgulloso de mi corto pasado, porque mi padre viene de La Inclusa con lo cual uno se siente un pirata en la historia. Ese es un poco el juego que utilizo con el seudónimo, pero que a la vez me llevo a gozarla leyendo poesías escritas por mujeres.
A lo largo de los años has compartido escenario con muchos compañeros de caminos, ¿Hay alguno con el que no hayas tocado nunca y que te gustaría hacerlo?
Mucha gente, y ya guiris ni te cuento. Calamaro... Ahora estoy escuchando a Pájaro, que toco con Silvio, que es de estos personajes malditos, como en poesía puede ser Leopoldo María Panero y en esto del rock and roll, Silvio es una escuela. Albert Pla ¿cómo no? El gran Tom Waits.
¿Eres más del contacto con el público de los conciertos en salas o de la magnitud del escenario de festivales?
Para mi hay que saber estar batallando en todos los lugares donde pongas el pie, en cualquier tipo de escenario, pero a mí lo que más me gusta son las salas. Me siento más músico, más farandulero del rock and roll en las salas, de notar la cercanía, además no de salas enormes sino de medio aforo, me gusta quinientas o seiscientas personas me parece que es lo suyo, esas salas acaloradas, donde el sudor se va pasando de uno a otro.
¿Cuál es el sitio más raro donde has actuado?
En lugares donde ahora son más auditorios, pero que eran iglesias, en el atrio de una iglesia derruida, la toma de la calle cada dos por tres, cuando nos apetece tocar en lugares que no están para eso, pero a la vez están, porque si tú lo haces precisamente por eso lo haces y están echo para eso. La presentación "Demasiado tonto en la corteza" fue una mañana de sábado de 28 de diciembre donde parecía que era broma, pero no. Hicimos tres actuaciones en esa mañana en tres lugares diferentes de las calles de Pamplona. Cada formato o cada historia en un lugar y fue muy bonito. Tocamos la parte de "Alzheimer" que hace referencia al tema de la salud, en frente al edificio de la salud. "Matxinada" que hace referencia al tema político, lo hicimos frente al gobierno de Navarra. Y la que subtitula "Y glam" lo hicimos en la catedral de Pamplona y ahí terminamos las acciones de tomar la calle y fue muy bonito. Son lugares mágicos cualquier rincón de la calle que uno decida tomarlo y tocar. Y luego están los lugares referidos a la memoria histórica que siempre me gustan. Yo voy con la guitarra acústica en el coche y si paso por algún lado y sé que pasó cerca, paramos y echamos un par de canciones, son lugares muy emotivos para mí.
Sobre la memoria histórica, sigues trabajando ¿no?
Si, para mí el trabajo fue de tal intensidad y de tal magnitud que tenía claro que no podía terminar con un disco. Entonces hicimos el disco de "La tierra esta sorda" con Barricada, la gira en eléctrico de ese año, y a la vez en acústico con Barricada también entramos a los institutos y centros sociales y nos hicimos veintinueve a lo largo de ese año. Era muy bonito el tema de los institutos porque era ir a dar mañanas al salón de actos del instituto que fuese con los alumnos y alumnas que estaban dando esa temática, generalmente en primero y segundo de bachiller y explicaba la canción que se iba a tocar, de que trataba y se creaba una conversación con los que hacían preguntas y tocábamos la canción. Eso no lo habíamos hecho nunca, también mira, hablando de sitios peculiares, pues esto fue también una historia muy peculiar que empezó como que íbamos hacer cuatro institutos mediante la relación que tengo con un maestro de la CGT de Aragón y gracias a eso se fue haciendo más grande la bola e hicimos veintinueve sitios. Eso se graba en directo en Zafra que fue muy bonito también por lo que supone la estancia allí, porque allí nació Dulce Chacón, dormimos en lo que fue su casa porque ahora es un hostal. Fuimos paseados por allí por todos los lugares relacionados con todo esto por gente entendida como Jose María Lama en concreto. Lo grabamos en directo y sale bajo la denominación de "En la memoria". Entonces luego sucede lo de Barricada que yo ya no estoy, me cuesta recomponer el asunto, pero una vez recompuesto con la gente que estoy ahora, hacemos el formato que se titula “Sombras que la luz grita” que son trece versiones de "La tierra esta sorda" ambientadas musicalmente para llevarlas a cabo en teatros o en casas de cultura, que ya hemos hecho diez por aquí, estuvimos en Paterna también en el teatro, entonces está teatralizado con atrezzo de teatro nosotros vestidos también un poco en la época para teatralizar la historia. El escenario se convierte un poco en esos años cuarenta y luego con proyecciones de Clemente Bernad, un fotógrafo y escritor que está muy metido en el tema de la memoria de aquí de Pamplona y es muy sobrecogedor toda la historia. La gente que va a ver el espectáculo pone mucho de su parte porque es muy emotivo todo, y luego ya como punto final y digo esto porque de alguna manera tengo que acabar aquello que empecé en dos mil ocho sería la toma de los nueve o diez lugares emblemáticos relacionados con la memoria como campos de concentración como el de Castuera o el de Santa Cruz de Moya o en el de aquí del Monte de Ezkaba o Los Pozos de Caudel. Lugares de memoria donde el grupo sería la excusa para dar protagonismo a estos lugares, y eso me gustaría hacerlo con el escenario que tenemos y con la banda, en vez de yo con la guitarra acústica que ya lo voy haciendo por todos los sitios donde puedo. Hacer una historia con la banda, eso que teatralizamos, pero en la calle, no llevaríamos el atrezzo, pero si serían las versiones que he hecho con la nueva banda porque yo con Brigi, con Txus y con Flako me siento muy cómodo con cualquier propuesta que les hago. Preparar también con ellos estas versiones ha sido una de las historias más bonitas que me ha podido pasar.
¿Cómo llegas a Motxila 21?
Tengo un colega que como persona es de lo más grande que uno se puede encontrar en la vida que es Mikel Baruyas, el tocaba en Tijuana in Blue, luego toco en los Guajalotes, somos de la misma edad y empezamos a la vez como quien dice. Mikel, llevaba mucho tiempo con ganas de montar algo con gente del síndrome de down porque ya conoce lo que es convivir con esta gente y tenía ganas de llevar a la práctica una historia musical, total que se lía la manta a la cabeza y se pone en contacto con la asociación de Navarra. Un proyecto que era preparar cuatro canciones para la fiesta de navidad; entonces me dan el toque para participar como invitado en un par de canciones. Todo comienza con esta invitación. El ensayo con ellos era en la tarde noche, mientras durante esa mañana, daba vueltas porque no sabía cómo relacionarme con los mocetes. Total, que llego, abro la puerta de su local para entrar a ensayar y de repente todos me vienen encima, me dan un abrazo y a los cinco minutos estoy tocando la guitarra con ellos como si llevase toda la puñetera vida. Un cariño impresionante. Todo lo que había pensado era fruto del miedo que todos tenemos a las cosas que no conocemos y como te hacen retraerte en ti mismo y estar a la defensiva. Total, que a partir de ese momento ya formo parte de la historia, voy a todos los ensayos, para mí una experiencia enriquecedora, cada ensayo era cada vez más grande. Se hace la fiesta de navidad, que para mí ese día fue impresionante porque te relacionas también con gente que hace danza con síndrome de down, con toda la gente de la asociación... y al día siguiente encuentro un vacío de la leche porque ya se acabó, la fiesta ha pasado, el siguiente invitado va a ser el Piñas de Marea. Total, que el Piñas está metido y Mikel estaba con la historia en la cabeza de montar algo más allá de lo que es la fiesta de la navidad y me dicen: “venga vente y vamos hacer algo más allá”, entonces con toda la gente que estamos de voluntarios y los mocetes y mocetas con síndrome montamos el grupo Motxila 21, ellos ponen el nombre que hace referencia al cromosoma 21 que es el que les hace diferentes y luego Motxila porque es para toda la vida. Comenzamos hacer versiones, comenzamos a componer canciones para el grupo, se va haciendo todo más grande, todos los martes ensayando de siete a nueve mínimo, hay una constancia, yo he estado ocho años ahí y ha sido así. Se hace un grupo autogestionado porque se cobra un pequeño cache de donde se saca para alquilar el microbús para ir a los sitios y a la vez sale para comprar las baquetas, los parches de los tambores… Todo esto con la autoestima de todos los que formamos parte de la historia pues es enorme. Todo esto es una lección de vida para mí, me siento muy alumno porque me enseñan cosas que de otra manera no aprendería. Me considero agraciado por haber sido parte de la historia. Yo llevo un año sin salir a tocar con ellos porque tenemos que saber cuál es nuestro papel hay dentro, realmente los protagonistas son ellos y nosotros simplemente lo único que tenemos que hacer aparte de aprender es aportar lo que podamos. Hay que saber salir en el momento preciso.
¿Cómo te organizas a la hora de crear canciones?
Puede pasar de todo. Ahora estoy pensado en hacer otro disco de estudio, tengo la idea de que sea triple, por ambientar musicalmente de manera diferente cada parte, me apetece no definirme como alguien que se dedica al rockabilly, o al punk, o al sinfónico. No me importa tanto eso como enredar en todo tipo de terreno musicalmente hablando. Prefiero que sea triple porque me apetece, entonces la primera parte yo me voy de vacaciones después de lo de La Ciudadela, y la playa pues está muy bien, un ratito y tal, pero me llevo la guitarra y mientras la peña disfruta en la playa... en fin yo me echo unos baños y después lo que hago es coger la guitarra y me voy y compongo canciones sencillas y me vuelvo de las vacaciones con siete temas más o menos montados, grabo la maqueta, grabo todos los instrumentos, las voces, los coros y eso lo presento al grupo, no para que se haga eso, sino para que se vea que hay canciones y a partir de ahí hay que destrozarlas, en el momento en que yo pongo eso en común no sé por dónde va a salir, pero ha sido un proceso muy bonito porque traje aquí la maqueta que grabe, algunas canciones si parecen a lo que yo había traído y otras pues no porque yo aquí me siento al piano o cojo la acústica, el Flako deja el bajo eléctrico y coge el contrabajo, El Brigi deja de aporrear la batería y coge unas escobillas y Txus también con la acústica y también algunas ambientaciones más eléctricas, entonces acaba saliendo una historia muy fronteriza y arenosa. Hemos grabado esa primera parte y muy contentos por lo que ha sido todo el proceso. A mí lo que me gusta no es tanto el resultado como el proceso hasta llegar a eso. Lo que va a ser la segunda parte de ese triple, ellos han compuesto la música y yo ahora una vez que hemos grabado lo que ellos han compuesto, voy a componer las letras, a partir de eso que ellos han hecho. Lo que ellos me han presentado a mi es la ostia, tiende más al hardcore que a otra cosa, entonces eso es lo que me gusta, eso me va a empujar a un tipo de currelo que no sé por dónde voy a salir porque aún no me he puesto con ello y el tercero tengo en la cabeza de por dónde puede ir porque estoy componiendo aquí en el local un poco a mi manera y tengo alguna idea, pero por donde acabará no tengo ni idea. Yo ahora sí que me quiero centrar mucho en esta segunda parte y no sé por dónde voy a tirar ni con las melodías, las letras, ni nada.
Existe una lucha abierta contra la piratería, las facilidades y las vulneraciones de ley que ofrece Internet. ¿Qué opinión tienes sobre ello?
Todo el tema del que se aprovecha del currelo ajeno, a mí no me gusta de entrada que se aproveche la gente. ¿Dónde termina ese aprovechamiento del currelo ajeno? No lo sé, yo no me aprovecho de los cánticos de soul o blues que hacían negros y negros recogiendo algodón, esto lo digo porque lo decían los Rolling Stones, que todo viene de esa gente, digo donde empieza una historia y empieza otra. A mí no me gustan los grupos tributo, por ejemplo, es algo que buf me da... porque refleja muy bien el nivel que ahora mismo hay en lo que se denomina rock and roll o rock urbano como se quiera llamar de este país. Es todo vivir del pasado, pero además del pasado de otros, cuando tus canciones compuestas en un momento dado hacen referencia a ese momento dado aunque puedan ser transferibles al presente. Yo no puedo renegar de los ochenta nunca porque toda esa fuerza que he mamado con la gente con la que me he relacionado, me ha dado esta cabeza para escribir y para componer. A partir de ahí cuando antes te comprabas un single o un LP lo pasabas a toda la cuadrilla y todo el mundo se hacía su cintica y eso era también piratería. Hablamos del robo de canciones, las propias compañías discográficas hacen subsellos para vender en gasolineras, realmente son posiblemente las que menos les importa el tema artístico de ese producto, simplemente lo ven como producto vendible y punto, que también a la vez a nosotros nos viene bien. La propia SGAE... posiblemente sería el primero en poner un pepino para que reviente de una puñetera vez porque la experiencia que he tenido con ellos, cuando de repente me encuentro sin nada después de lo de Barricada, es pedir para grabar mi currelo que llevaba bajo el brazo y me mandan a tomar por saco, alguien que lleva treinta años ahí metido como un gilipollas. Te quiero decir que por mi puede reventar y yo le daría fuego a la mecha, siendo una puñetera sociedad de gestión y lo único que ha hecho es chupar del bote. ¿Hay otra solución mejor para que tu obra quede registrada como tuya? Pues no lo sé, no conozco... Copyleft, nadie me explica bien lo que es eso, no tengo ni idea. Yo mientras si me tengo que enterar de todo esto fíjate el tiempo que perdería en composición. Yo he sido el más tonto de este país a la hora de hacer canciones, siempre he repartido y luego te encuentras con que todos te meten el mango del martillo por donde pueden. ¿Qué es la piratería? Entendida como hijoputez, lo único que te puedo decir que la única manera que tengo de defenderme es a tortazos que es lo que yo he aprendido en la Txantrea, luego los trasladas a los enfrentamientos con la policía.
¿Crees que el mundo digital va a terminar con el mundo de la música tal y como lo conocemos hoy?
Es posible, no es algo que me preocupe en exceso. Me gusta vivir la música en directo y seguimos sacando nuestros propios productos que son pues un DVD y un CD fabricado aquí pues mil copias de "Sombras que da luz grita" o una colección de cuatro EP´s que iba cada uno regalado a quien compraba una entrada para ver al Drogas durante la gira anterior. Entonces cada tres meses salía un EP nuevo de cuatro canciones, y al final un paquetico con los cuatro EP´s que a lo largo de la gira surgieron. Me gusta cuidar las historias de cara a quién entre en esto que se denomina El Drogas, se sienta de alguna manera bien tratado. Prefiero que el tomate sea de huerta y sepa a tomate que no sea muy brillante y bonito en la forma entre por la vista y no sepa a nada. Me gusta que el desastre me rodee, pero que ese desastre tenga el sello del Drogas.
¿y el futuro de la música, por donde crees que pasa?
El concepto que tengo de la música pasa por los directos, yo soy un músico de directo, pero si mañana por lo que sea tengo un accidente y eso me impide volver hacer directos, seguiré componiendo, seguiré escuchando música, me adaptare a lo que me tenga que adaptar. Yo ahora no entiendo mi persona ni a mi personaje sin los directos. Para mí es el sumun de todo, de las grabaciones, de las entrevistas, viajes... yo soy feliz viajando porque sé que voy a ir a un sitio a tocar. El futuro generalizado... no lo sé, cada uno tenemos que aportar lo que buenamente sepamos y podamos.
¿Veremos a un Drogas de más de 65 años sobre un escenario?
Pues no tengo ni idea, tampoco me preocupa en exceso. Me gusta el número 69 por razones obvias y a partir de ahí pues no sé, si llego pues guay, si paso de eso será buena señal porque querrá decir que estoy a gusto, si no llego, que me quedan cuatro días, que sean como lo que estoy viviendo ahora. No soy tanto de lo que me puede venir de aquí a diez años como de lo que precisamente me viene mañana que va a ser todo el día cantando y pasándolo a gusto y haciendo disfrutar a la gente.